El terrible incidente ocurrió el pasado domingo en una casa en el área de la av 21 del noroeste y la calle 81, en West Little River
La niña de cuatro años que había sido herida de bala el pasado fin de semana por uno de sus hermanos en una casa en Miami-Dade murió, según confirmaron el viernes las autoridades.
El incidente había ocurrido el domingo en una casa en el área de la avenida 21 del noroeste y la calle 81, en West Little River, en Miami-Dade. La menor fue transportada inmediatamente con un impacto de bala en la cabeza al Centro de Trauma Ryder del hospital Jackson, lugar donde fue atendida hasta que sucumbió a sus heridas.
Quavanta Demettris Ennels, de 25 años y dueño del arma, fue arrestado y acusado de posesión de un arma de fuego por un convicto, según informó el lunes la policía de Miami-Dade.
Andre Marin, quien es detective de la policía de Miami-Dade, explicó que cuando se presentó el incidente había cuatro niños de 6, 4, 3 y 2 años de edad en el interior de la casa, y solo estaba un adulto con ellos.
Según lo que indica el reporte del arresto, la niña y sus hermanos estaban en una recámara donde Ennel tenía la pistola dentro de una mochila. Uno de los menores sacó el arma y la disparó hiriendo a la niña en la cabeza, aparentemente de manera accidental, señala el reporte. La policía todavía no ha podido dar a conocer la identidad de la niña ni de su relación con Ennels.
Por su parte, Ennels, fue arrestado por haber dejado desatendida su arma, una pistola Taurus de 9 milímetros en una mochila.
«Está bravo por su arresto domiciliario mientras que hay una pequeña que lucha por su vida porque él dejó el arma sin seguridad», dijo la jueza este pasado lunes cuando Quavanta Ennels se presentó en corte de fianza acusado de delito grave por posesión de arma de fuego.
El acusado confesó haber comprado un arma de fuego de forma ilegal aproximadamente tres meses antes de los sucesos por un precio de 250 dólares, además de algunas municiones. El hombre admitió haber dejado el arma en el cuarto donde los menores se encontraban solos sin supervisión de un adulto.
La jueza le fijó a Ennels una suma de 15 mil dólares de fianza, además impuso arresto domiciliario y permanecer con un rastreador electrónico.